Colocación del Polar 360

Colócate el Polar 360 alrededor de la muñeca de forma que el sensor óptico de frecuencia cardíaca situado en la parte inferior del dispositivo quede firmemente pegado a la piel. Ajusta la correa de forma que quede bien ceñida y te resulte cómoda. Los cierres de velcro de ambos extremos permiten ajustar fácilmente la correa a un tamaño adecuado.

Para que la medición sea precisa, es importante que el dispositivo esté bien colocado:

  • Si llevas el dispositivo en la mano izquierda, asegúrate de que el logotipo Polar está orientado hacia el brazo.

  • Si llevas el dispositivo en la mano derecha, asegúrate de que el logotipo Polar está orientado hacia los dedos.

  • Debes llevar el dispositivo Polar en la parte superior de la muñeca, como mínimo un dedo más arriba del hueso de la muñeca.

  • Aprieta firmemente la correa alrededor de la muñeca. El sensor de la parte posterior debe estar en contacto constante con la piel y el dispositivo Polar no debe moverse en el brazo.

  • Una buena forma de comprobar que la correa no está demasiado floja es levantar ligeramente la correa en ambos lados del brazo y asegurarse de que el sensor no se levanta de la piel. Al tirar de la correa hacia arriba, no deberías ver la luz LED del sensor.

De vez en cuando, viene bien dar un respiro a tu muñeca, especialmente si tienes una piel sensible. Afloja la correa, por ejemplo, cuando tu actividad es baja, para evitar irritaciones de la piel. También puedes variar un poco la posición del dispositivo en la muñeca. De vez en cuando, quítate de la muñeca el dispositivo Polar.

Debes lavar regularmente el dispositivo, la correa y la piel del brazo, especialmente después de sudar. Utiliza una solución de jabón suave y agua corriente. Para más información, consulta Cuidados de tu Polar 360.