¿Cómo me pongo mi M430?
Lee los consejos que aparecen a continuación para garantizar que tu M430 funciona de forma óptima durante el entrenamiento.
Ponte el M430 unos minutos antes de iniciar la medición de frecuencia cardíaca para que la piel se adapte al dispositivo. Para obtener lecturas exactas de frecuencia cardíaca, tienes que llevar el M430 ajustado encima de tu muñeca justo detrás del hueso de la muñeca. El sensor de la parte posterior debe estar en contacto constante con la piel, pero no demasiado apretado para no impedir el flujo sanguíneo ni estar incómodo. El movimiento entre el sensor y la piel puede interferir en las lecturas.
Tras una sudorosa sesión de entrenamiento, te recomendamos que laves por separado el M430 con agua corriente utilizando una solución de jabón suave y agua. A continuación, sécalo con un paño suave.
Afloja la correa un poco después del entrenamiento para un ajuste más cómodo y para que tu piel respire.
De vez en cuando, viene bien dar un respiro a tu muñeca, especialmente si tienes la piel sensible. Quítate tu reloj para running y recárgalo. De esta forma, tanto la piel como tu dispositivo pueden descansar y estar listos para el siguiente entrenamiento.